Lema

"Carthago delenda est - Ceterum censeo Carthaginem esse delendam"

jueves, 3 de marzo de 2016

EL BARRIO DE FUENTE DEL BERRO Y SUS 42 ESCALONES



El barrio de Fuente del Berro y sus 42 Escalones

El barrio de Fuente del Berro es uno de los seis barrios administrativos que componen el Distrito de Salamanca de Madrid. Está conformado por la colonia de Fuente del Berro, de pequeñas casitas adosadas proyectadas por Gregorio Iturbe, durante el “Plan de Casas Baratas" a principios del s.XX, la "Quinta del Espíritu Santo", en la que se edificó la Parroquia de San Patricio - antiguo colegio-asilo de niñas de las Hermanas de la Caridad de San Vicente de Paul y contiene edificios significativos, entre otros, como el colegio "Amador de los Ríos" en Marqués de Zafra, la “Casa de las Abejas" de Secundino Zuazo y el "Grupo de Viviendas Marqués de Urquijo" de José Antonio Salazar.
.
Ortofoto 2013

Ortofoto 1975
 El barrio limita al norte con la calle de Alcalá en su descenso desde la plaza de Manuel Becerra, antes de Roma, hacia la plaza de toros de Las Ventas; al oeste, con el parque de La Fuente del Berro, aterrazado sobre la M-30; al sur con el nudo de O'Donnell en su tramo ya de autovía y al éste, con la calle Doctor Esquerdo. Esta última, es la "fachada" que la debiera integra con la ciudad, y de entre sus calles, sólo  una única salida exclusivamente peatonal, en la calle Peñascales, con sus 42 rotundos y "ajardineados" escalones.
.
Casa de Las Abejas
Parroquia del Sagrado Corazón
Parroquia de San Patricio
Colegio Amador de los Ríos
Plano de la Colonia Iturbe
Casa Colonia Iturbe










Por estos 42 escalones, como digo, el barrio presume unirse al distrito de Salamanca, luchando contra la depresión de la ribera del antiguo Abroñigal, hoy calle 30 y junto al "Centro de Especialidades García Noblejas". 

En la calle de Peñascales, se inicia  ésta imponente escalinata de 42 graníticos y geométricos escalones, actuando como elemento "disuasorio" para conectar peatonalmente a sus vecinos y visitantes con el resto de la ciudad, Ya que su pendiente, y número actúan como tales.
.


 
Parque de la Quinta de Fuente del Berro
.
Una población heterogénea, de viejas familias: humildes y burguesas, emigrantes e inmigradas por conveniencia, políticos contemporáneos, artistas de vanguardia y modernos ejecutivos, conviven en éste barrio de La Fuente del Berro, que se planeó inicialmente sobre suelo consagrado, por sus usos iniciales mayoritariamente religiosos.
Ordenado en una terraza allanada sobre un ambicioso arroyo, núnca valorado, cuyo cauce debió en tiempos, corresponderse por su dimensión, mucho más principal que la vega del Manzanares. 

Por el entorno de la parroquia de la Sagrada Familia, frente a sus 42 descuidados y grises escalones, visualmente de casi imprevisible coronación, se comunica con la ruidosa y atribulada calle de Doctor Esquerdo, donde entre vómitos de tráfico por y entre sus túneles, como si serpientes continuas articuladas de vehículos se tratara, los coches aparecen y se sumerge en el asfalto, volviendo a surgir ruidosa y repetidamente.
.
Uno de los túneles de la calle de Doctor Esquerdo
.
 Si deambulamos, por sus calles, el comercio, tradicional, no es escaso, pero limitando su éxito a su vecindaje, pues ni el transporte público ni la malla urbana  del distrito, la pérmean o trascienden, con la excepción de la calle de Jorge Juan, que casi por casualidad y seguramente aprovechando la geometría y coincidencia, lo atraviesa, cual arnés o retén y así desde la calle Recoletos, identitariamente con el distrito de Salamanca, la une hasta las tapias de su parque.

Esquema básico de circulación y conexión con el resto del barrio

No es isla por decisión propia, ni poblado por autoexclusión, pero ésta única calle, Jorge Juan, la conecta a su distrito, pero en sentido de acceso o llegada; para  su incursión, no su proyección, vertiendo el resto de sus estrechas cuestas hacia la ciudad, en el serpentíneo flujo incontinente de vehículos, cual barrera infranqueable y hacia una única dirección: la plaza de Manuel Becerra.

Si miramos desde el Distrito, la calle de Peñascales, deambulando por Doctor Esquerdo, dejando atrás la "Casa de la Moneda" y avanzando a pié hacia este barrio, a la altura de “La Moderna Apicultura”, singular microedificio junto a la “Casa de las Abejas”, y en el antes llamado "Paseo de Ronda", se abre por sorpresa y sin indicación, a casi doble ancho del resto de las calles, cual medianera olvidada o inconclusa, un vertiginoso hueco con frondoso ajardinamiento central, en escalinata dimensionado, con sus 42 casi verticales escalones, que nos invita a sumergirnos en el barrio de la Fuente del Berro. 

Quizás sea la más amable de las posibles invitaciones al caminante que pueda hoy ofrecerse como acceso al barrio...
.


Escaleras de la calle de Peñascales
 
Estos 42 descansados escalones en tres tramos, desde la calle Doctor Esquerdo, nos invitan curiosamente a divisar el barrio, su plaza, su parroquia, sus gentes... Se atisba su parque, del que al amanecer, sus pavos reales escapan y pasean hasta las inmediaciones, como embajadores de una personal y pintoresca impronta, en la que parece sobreviven exclusivamente en retroalimentación de entre su vecindaje.

Pero para conjunto del Barrio de Fuente el Berro, si su habitación es tranquila, ordenada y completa, los 42 escalones, son barrera definida y disuasoria para salir pedrestemente de él. Su número, su pendiente, su seguridad, actúan como freno, como recordatorio y pereza de lo que se abandona, como penitencia o castigo hacia lo que inevitablemente se precisa: dificulta acceder a los servicios sanitarios, a las escasas infraestructuras de ocio y servicios, y en definitiva a la conexión con el resto de la ciudad.

Nadie se ha acordado a día de hoy de ellos, de los 42 escalones, de los vecinos del barrio, de la exclusión consentida, del aislamiento obligado…

¿Tán dificil es proyectar e implantar, como en otras muchas ciudades, con casuísticas más amables, una estructura asistida, una escalera mecánica o un elevador?
.
Escaleras Mecanizadas (Ejemplo 1)
                        

Escaleras Mecanizadas (Ejemplo 2)
                        
Qué triste es que un solo párrafo resuma tan importante necesidad y que al menos dos fóleos lo justifiquen…



                                                                                  Martin Sainz-Trápaga y Castell